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domingo, 28 de diciembre de 2008

Borrador de proyectos



















Como todos los años, se hacen proyectos sobre las actividades del próximo.¿Qué se puede esperar en el Círculo Literario?

En primer lugar, abrir el segundo concurso literario Pablo Guíñez, que en el año pasado fue convocado para poesía y que ahora podría estar dirigido a la narrativa. Recordemos que en 2008 el premio fue un libro de pequeño formato, pues es la mejor manera de premiar a un escritor: publicando su obra. Esta vez podría ser una cantidad de relatos para un volumen algo mayor, pues el narrador necesita mayor amplitud para expresarse. En el primer certamen se estableció que los concursantes debían habitar en Maipú. Sin embargo, el requisito resultó limitante, porque no fueron muchos los trabajos presentados. De mantenerse la restricción, habría que desplegar mayores esfuerzos en dar a conocer el concurso y obtener una concurrencia más relevante. Factor importantísimo lo constituye el jurado y por lo tanto, habría que obtener la colaboración de escritores de la talla de los poetas Raúl Zurita y José María Memet, que actuaron en el primer evento.

Otra actividad de máximo interés es la continuidad de la Revista Cultural Maipú, para la cual no hubo presupuesto durante el 2008 en el Depto. de Cultura, ya que sólo apareció a fines de año un ejemplar editado por la Municipalidad en forma directa.

La tercera parte del futuro proyecto podría ser la participación en los Fondos Concursables del Círculo, que permitan difundir la literatura entre la población de la comuna, contribuyendo así al fomento del libro y la lectura.

En el pasado se reunían integrantes e invitados en los cafés literarios, lo cual fue interrumpido al no contar con espacios adecuados, ya que la Biblioteca Municipal no dispuso de tardes libres este año, además de decidir la presentación de sus propias tertulias literarias y el Teatro Municipal estuvo ocupado íntegramente por oficinas. Como ahora se han trasladado al edificio consistorial ya en buenas condiciones, existe posibilidad de retomar esta costumbre, para lo cual se estudiaría la mejor forma de hacerlo con buen éxito. En las anteriores ocasiones se han presentado autores de la organización dando a conocer sus obras, se ha invitado a escritores de otras comunas o se ha dado cita a diversos participantes en torno a una idea central. Es una buena ocasión de reunir a diversas personas a tomar parte en una conversación de un tema literario con el apoyo de la música y artes visuales en la reconfortante compañía de un café.

Otra actividad de interés sería organizar talleres literarios en las diversas juntas vecinales, para acercar a los jóvenes las herramientas necesarias para mostrar y desarrollar su obra poética o narrativa.

Hay un punto que personalmente me interesa desde hace tiempo: los libros artesanales y los libros objeto. Los hay hermosos, prácticos, tremendamente creativos. Deseable sería obtener la asesoría de personas que practiquen este arte, aprender las diversas técnicas y comenzar a armar nuestros propios libros en pequeñas cantidades, para compartir con otros centros literarios.

Ahora, invito a los demás integrantes del grupo a sugerir sus propios proyectos. Termino deseando a todos un nuevo año fructífero en actividades y obras concretas, además de pasarlo bien con muchísima salud.